El mercado audiovisual desde la perspectiva de la Black Macic Cinema Camera.
En
el 2013, una noticia revolucionó la escena de producción audiovisual en todo el
mundo, una empresa australiana llamada BlackMagic Design (Magia negra diseño en
su traducción al español) lanzó al mercado la primera cámara de cine que
costaba $1999, si efectivamente una ganga. Para la industria emergente de cine
peruano fue un boom ¿Quieres rodar tu primera película y la renta de equipos te
hace vender tu casa? Bueno. Puedes ahorrarte unos dólares con esta cámara y
tener grandes resultados audiovisuales, incluso en 4K.
El
la convención internacional NAB 2013 (en los Estados Unidos de Norte América)
fueron presentadas las cámaras de la primera gama de las cinema cameras de la
compañía BlackMagic Design. Se presentaron la Pocket Cinema Camera (1080p), la
Cinema Camera (2.5k) y la Production Camera (4K), ya bacán con tu resolución
mayores al FHD, BlackMagic, pero ¿A que de debió tu creciente fama? Pues a la
posibilidad de poder grabar video en formato RAW (Cinema DNG), ahora muchos se
preguntarán ¿Qué es eso? ¿RAW no es para fotografía? Pues no, grabar en formato
RAW significa poder tentar una calidad del nivel de los Blockbusters que llegan
a las carteleras o más aterrizado aún, poder tener aparte de la fastuosa RedOne
una opción más económica, que finalmente terminaría por revolucionar el mercado
audiovisual.
En
este contexto, marcas como Panasonic y Sony, con importante presencia en la
industria audiovisual lanzaron sus cámaras 4K, teniendo la GH4 (Panasonic) y la
Alpha 7 (Sony) buenas opciones que empezaron a competir con la magia negra en
cuestiones de rango dinámico y slow motion, como valor agregado. En especial la
propuesta de Sony con su nueva Alpha 7s, fue totalmente arriesgada y directa
para atacar el mercado de las cámaras compactas, pues este modelo incluye un
sensor diseñado para condiciones mínimas de luz (Kubrik se hubiera sentido un
Dios con este equipo) con un alcance de ISO 60,000 con poca perdida de calidad
en la imagen, ciertamente este plus despertó la atención de realizadores pro
como indie porque significaba un ahorro en de luz en el presupuesto; contra
esto no podría competir la magia negra, puesto que sus cámaras son realmente
malas en bajas condiciones de luz (experiencia personal), a pesar de grabar en
RAW la calidad se ve muy perjudicada.
Entonces
surge la pregunta si realmente la magia negra funciona, pues sus competidores
se lanzaron a la batalla (incluso Samsung, así de mona, sacó su serie de
cámaras 4k, que por cierto no está nada mal, parte de la apertura del mercado).
Sin embargo, BlackMagic tenía un as bajo la manga, después de su pésima racha
con su sobrevalorada cámara URSA.
Es así como para competir en detalles técnicos, además de tamaño (bastante más compacto) y sobre todo en costo (ja, ja, ja), la empresa australiana nos presentan su reciente BlackMagic URSA MINI 4.6K (Sí, un poquito más que el 4K que ya es tan popular), una cámara con especificaciones mejoradas, mejor usabilidad y al módico costo de $ 2,999. Ahora es cuestión de esperar con que nos sorprenderán las empresas rivales, pero sin duda, esta vez la magia negra ha dejado la vaya muy alta, clásico en su estilo.
*Podrás pedir la BlackMagic URSA Mini a partir de Junio, directamente desde la página de la empresa.
